16 de diciembre de 2011


Como personas, como amigos, como seres humanos, todos intentamos hacer las cosas lo mejor que sabemos.
 Pero la vida está llena de giros inesperados.
Y justo cuando parece que tu barco llega a tierra, el suelo bajo tus pies se mueve y te tira al suelo, si tienes suerte solo te harás un moratón o un cortecito que podrás tapar con una simple tirita, pero algunas heridas son más profundas de lo que parecen en un principio y se necesita más que un “arreglo rápido”, con algunas heridas te tienes que quitar la tirita y dejarlas respirar durante un tiempo.

13 de diciembre de 2011


¿Recuerdas cuando eran pequeños y mordían a otro niño sin querer en el recreo? 
El maestro decía ¡Pídele perdón!.
Lo decíamos pero no lo pensábamos porque el mocoso al que habíamos mordido se lo merecía. 
Pero cuando creces disculparse no es tan fácil, cuando acaban los días de recreo hay que decirlo en serio.

Lo siento, no siempre es suficiente, quizás porque se utiliza muchas veces, como arma, como excusa
Pero cuando lo sentimos y lo utilizamos como es debido, cuando lo pensamos… 
cuando nuestras acciones dicen más que las palabras… 
cuando lo hacemos bien, lo siento es p e r f e c t o.